Categoría: Cuadros zen

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                  Cuadros zen Flor de la vida, mandala y otros símbolos

                  Aumenta la tasa vibratoria de tu casa


                  Los mandalas y los símbolos sagrados son radiaciones que transforman nuestro entorno, como el Feng Shui puede hacerlo.

                  En cuanto se coloca un mandala en un lugar, todas las energías se transforman, las vibraciones se elevan. Colocar un mandala de este tipo en nuestro entorno o concentrarnos en él nos ayuda en nuestra vida diaria a transformarnos y a atraer hacia nosotros las vibraciones de la energía correspondiente.

                  Los mandalas se han utilizado mucho en terapia para crear una atmósfera especial y, sobre todo, para cambiar ciertas vibraciones de forma positiva.

                  El gran psicoanalista C.G. Jung había experimentado durante mucho tiempo el poder de esta forma con sus pacientes y observó su asombroso poder. Parece que ahora el público está llamado a beneficiarse de la profundidad de su investigación pionera.

                  Según C.G.Jung (1875-1961), a través de la contemplación y la concentración, el mandala tiene la función de atraer intuitivamente la atención hacia ciertos elementos espirituales para promover su integración consciente en la personalidad.

                  Jung había observado que el inconsciente, en sus períodos de agitación, puede producir espontáneamente mandalas. Para él, el mandala simboliza, tras el paso por fases caóticas, el descenso y el movimiento de la psique hacia el núcleo espiritual del ser, hacia el Ser, lo que conduce a la reconciliación interior y a una nueva integridad del ser.

                  "¡Lo esencial es que el mandala opere, que actúe sobre los ingredientes sutiles de la conciencia! Se dice que los adeptos más consumados no necesitan ni colores ni polvos para meditar; no necesitan más material que la textura, ciertamente adamantina, de la mente. Sus mandalas son visiones, edificios interiores que sólo se colorean con la intensidad de su concentración

                  "Cada vez me resultaba más evidente que el mandala es el centro. Es el modelo de todos los caminos. Es el camino hacia el centro, hacia la individuación

                  No es de extrañar que el símbolo del círculo alrededor del centro, y por tanto el mandala, se encuentre en todas las religiones, culturas y tradiciones, tanto occidentales como orientales. El círculo es el símbolo de la vida Nacimiento, madurez, muerte y resurrección o renacimiento.


                  El cuadro mandala como herramienta de meditación y bienestar


                  El mandala es, en primer lugar, un centro y, a continuación, patrones concéntricos que irradian hacia el exterior.

                  - El centro es la concentración, el ser, el nacimiento, el principio y el fin también..
                  - Alrededor del centro, los demás círculos simbolizan la organización de nuestras relaciones con el mundo.
                  - El cuadrado que suele encerrar el mandala es nuestra realización en el mundo.

                  Durante miles de años, la creación y contemplación de mandalas se ha utilizado para meditación como ritual sagrado entre los monjes budistas, ya sea comoherramienta terapéutica para descubrirse y curarse a sí mismo, como con los chamanes amerindios.

                  Jung descubrió que el mandala era un medio poderoso para el crecimiento y la transformación, un símbolo de integridad.

                  Lo utilizó para explorar su propia psique y luego la de sus pacientes. Jung estudió el mandala en todas las culturas y llegó a la conclusión de que era una "forma arquetípica universal", un símbolo universal.

                  Jung dijo de los mandalas: "Un sentimiento de paz interior, de reconciliación, de orden en medio del caos".

                  Desde entonces, el mandala se utiliza en arteterapia, desarrollo personal, psicoterapia... Sus virtudes son unánimemente apreciadas: reenfoque, calma interior, autoconocimiento, tranquilización, reestructuración psíquica..

                  Por eso, muchos terapeutas están muy entusiasmados con nuestros cuadros.

                  Puedes elegir entre nuestro catálogo de todos los mandalas y símbolos disponibles en nuestra tienda para elegir el que más te convenga.

                  Nosotros mismos imprimimos los trípticos, los formatos de 20 y 30 cm. Después confiamos la impresión de los modelos más grandes a una imprenta local.